Ahora es Qualcomm: la Comisión Europea le impone una multa de 242 millones de euros
Otra raya más al tigre. Ahora, Qualcomm, la empresa estadounidense fabricante de chips, ha sido objeto de una multa de 242 millones de euros por parte de la Comisión Europea, tras haber incurrido en una práctica monopólica en el periodo comprendido entre los años 2009 y 2011, al vender chips de banda ancha 3G por debajo del precio de costo.
Qualcomm, la compañía fundada en 1985 y que tiene su sede en la ciudad de San Diego, California, vendió estos dispositivos a Huawei y ZTE con la intención de deshacerse de Icera, una compañía británica de software, que en ese momento estaba despuntando como una empresa confiable en el mercado de los chips 3G.
Los actos del mayor fabricante de chips del mundo, habrían perjudicado severamente a Icera, que vio disminuir dramáticamente el precio de sus acciones en el mercado, al punto que el año 2011 fue adquirida por Nvidia, la empresa estadounidense especializada en el diseño de unidades procesadoras de gráficos para el mercado de los videojuegos, a un precio de 367 millones de dólares pagados en efectivo.
“Qualcomm vendió chipsets de banda base (para dispositivos móviles conectados a Internet) a un precio por debajo del costo a clientes clave”, escribió en su cuenta de Twitter Margrethe Vestager, comisaria europea de Competencia. “¿Su intención? Eliminar a un competidor. Esto es ilegal bajo las reglas antimonopólicas de la Unión Europea, de modo que hoy hemos multado a Qualcomm con 242 millones de euros”.
Más allá del hecho, que podría ser meramente anecdótico, el año 2015 Nvidia anunció que Icera relajaría sus operaciones al punto que, tiempo después, liquidaron la división de banda base de chips 3G.
Esta no es la primera vez que la Comisión Europea impone una multa a Qualcomm: el año pasado también recibió una infracción, ésta por 997 millones de euros, al haber incurrido en la misma práctica: abuso de posición dominante en el mercado de los chipsets. La multa actual equivale a 1.27% de los ingresos facturados por Qualcomm el año 2108.
La sanción a la empresa tiene lugar en un momento en que las llamada GAFA (un acrónimo para referirse a Google, Amazon, Facebook y Apple) están siendo severamente cuestionadas por los legisladores estadounidenses, y en medio de la imposición por parte de París de la llamada Tasa Google, un impuesto que grava las ventas de las empresas tecnológicas que tengan lugar en Francia.