Alertan sobre la necesidad de utilizar “condones USB” en las terminales de carga pública

Los llamados bloqueadores de datos USB, mejor conocidos como”condones USB” están en auge, aunque muchos desconocen que existen. Estos nuevos dispositivos protegen contra los peligros del llamado juice jacking.

En la actualidad existen puertos USB para cargar nuestros móviles por doquier. Los hay en aeropuertos, en los baños públicos, en cualquier hotel, en cada centro comercial y cada vez más en medios de transporte como aviones, autobuses y trenes.

Esto que parece tan ventajoso encierra un peligro para nuestra privacidad. La disponibilidad masiva de estos puertos es en realidad una brecha que los cibercriminales podrían utilizar para acceder a nuestros datos más sensibles.

A cargar en uno de estos puertos, se puede correr el riesgo de ser víctima del juice jacking, un especie de ataque cibernético que consiste en que “los criminales instalan un programa malicioso en los puertos de carga de las estaciones que infectan teléfonos y otros dispositivos de usuarios desprevenidos”.

Ante este mal, el remedio es utilizar los llamados “condones USB”, pequeños adaptadores USB con puerto de entrada y salida que permiten la alimentación energética del dispositivo pero bloquean el intercambio de datos. Su precio ronda los US$10 y son pequeños y, por tanto, portables.

De acuerdo a expertos del sector, las consecuencias de un ciberataque de esta naturaleza pueden ser demoledoras.

Asimismo, un informe sobre ciberseguridad de la compañía tecnológica IBM declara que “las infecciones por softwares maliciosos secuestran la potencia informática, resultando en un mayor uso de la computadora y una ralentización de los dispositivos”.