Banco Central Europeo subirá las tasas de interés por primera vez en 11 años

Una inflación en la eurozona superior al 8 por ciento, el euro por debajo del nivel del dólar y una crisis de gobierno en Italia es el escenario en el que el consejo del Banco Central Europeo (BCE) se reunirá este jueves para hacer frente a la creciente inflación y subiría las tasas de interés por primera vez en 11 años

El plan para intentar frenar el aumento de los precios se anunció en junio y consiste en un incremento inicial de 25 puntos básicos, el primero desde 2011 a la fecha, según consigna un cable de la agencia AFP.

La entidad monetaria lleva meses preparando el fin de un período de dinero barato, que ayudó a la economía a superar las crisis de los últimos años.

La debilidad del euro que esta semana se ubicó por debajo del dólar, sacude a la tasa de inflación , por el lado de que se encarecen los productos importados que se consumen en el Viejo Continente.

El incremento sería de sólo 25 puntos básicos por lo que la tasa de depósito se iría a -0,25%, manteniéndose en terreno negativo hasta la suba de la tasa en septiembre que podría ser de medio punto.

Ver más: La inflación de la eurozona bate récord en junio

Para entonces, los tiempos de las tasas de interés negativas habrían terminado. Sin embargo, muchos bancos ya están reaccionando: solo en Alemania, casi 50 bancos ya las  han suprimido por completo, y es probable que otros les sigan en las próximas semanas.

El ajuste de la política monetaria del BCE será menos intenso que el de la Reserva Federal que en su reunión del 27 de julio subirá la tasa 75 puntos básicos. 

 “El BCE llega demasiado tarde”, afirma Gertrud Traud, economista jefe de Helaba, el banco regional de Hesse-Turingia (Alemania).

“En todo el mundo, los bancos centrales ya han subido los tipos de interés, ahora el BCE también debe demostrar que se toma en serio su trabajo y que lucha contra la inflación”.

La suba de tasas de 25 puntos básicos parece “una reacción vacilante dadas las altísimas tasas de inflación”, dijo Ulrike Kastens, economista del banco DWS. Una suba de 50 puntos básicos ya “estaría justificada”, acotó, por su parte, Jörg Krämer, economista de Commerzbank.

Algunos “halcones” del Consejo de Gobierno del BCE también están a favor de tomar medidas más drásticas pero la mayoría apoya “un primer paso proporcionado” para no alterar los mercados.

Los expertos ponen como ejemplo las decisiones tomadas por la Reserva Federal de EEUU, que ya dieron señales de que están dispuestos a subir la tasa de interés a niveles que pueden llegar a repercutir sobre la actividad económica, de manera de mantener un enfoque agresivo en la política monetaria para bajar la inflación.

Además, prevén que el objetivo de la FED es limitar el crecimiento hasta que se vean pruebas concretas de que baja la inflación, algo que todavía no ocurrió. En Estados Unidos la inflación aún no da signos de ceder.

A mediados de junio último, la Fed subió la tasa en 75 puntos básicos y la ubicó en el rango de entre 1,5% y 1,75%.

El riesgo para los emergentes, en un mayor o menor grado, es que la suba de tasas provoque mayores riesgos financieros y una mayor devaluación de las monedas de estos países y la Argentina no está exenta de dicho riesgo.

Los mercados estarán particularmente atentos a la conferencia de prensa de Christine Lagarde posterior a la reunión y las proyecciones económicas de la entidad.