Business Intelligence: Mitos sobre su uso

(América Latina) Business Intelligence es más que una solución para recopilar información de los sistemas utilizados en la compañía y transformarla en gráficas y reportes; un sistema BI de buena calidad debe permitir también la integración de información disponible desde diversas fuentes de la empresa, aunque no estén tan organizadas o concentradas, con el objetivo de facilitar al usuario final, al tomador de decisiones, el análisis del desempeño de la compañía.

También es un mito que un sistema de BI solamente deba reportar el pasado de la empresa: debe soportar la planeación y permitir realizar la proyección para los próximos meses y años, con la entrega de información organizada que permita, por ejemplo, identificar oportunidades en los departamentos de la empresa para reducción de costos, maximización de ganancias y mejora de procesos operativos.

La base de las herramientas de BI es la información, de manera que todo debe empezar con la implementación de un sistema ERP, Enterprise Resource Planning. El objetivo de un sistema de administración es, principalmente, traer control para la empresa. La empresa controlada, con sus procesos definidos y debidamente configurados en el ERP permitirá que los datos sean registrados y que, con el uso del BI, se transformen en información para la toma de decisiones.

Lo mejor es implementar la solución de BI cuando la empresa tenga la etapa de control dominada, madura. Normalmente, eso significa tener entre seis meses y un año de datos en el sistema administrativo, para que podamos hacer los comparativos y analizar la evolución de la empresa, además de permitir elaborar algunos ensayos para el futuro.

Implementar una solución de BI no hará que la empresa tenga un futuro garantizado y sus números sean conocidos por los directivos. Todo depende de la configuración y de la definición de los indicadores y consultas que serán necesarios para eso. Vale la pena decirlo una vez más: es el emprendedor el que conoce su negocio. Definir los indicadores y consultas que son el corazón del negocio es una tarea de los directivos. Sin esa correcta definición, la implementación de BI no será exitosa, de nada servirán las gráficas coloridas y bonitas que en realidad nada “hablan” del negocio, de la empresa.