Chatbots conversacionales: ¿Qué rol juegan dentro de las Pymes?

Hay pocas dudas de que la sanidad o la banca acabarán más tarde o temprano de explotar todo el potencial de la IA que la legislación permita y el entorno mundial imponga. Pero  lo realmente crucial en torno a la IA quizá sea la creación de una cultura digital receptiva que permita a las PYMES y a los sectores tradicionales abrazar su potencial.

Avances en el reconocimiento de imágenes son ya explotadas en multitud de sectores desde la conducción automática, pasando por la medicina, los controles de seguridad, o la ropa hecha a medida. Se fijan ambiciosas metas a la hora de predecir y anticipar el comportamiento de los mercados y los gustos de los consumidores, incluso la capacidad de personalizar para cada individuo los productos y servicios. ¿Pero por donde empiezan las PYMES?

Los revolución del información y la comunicación: chatbots conversacionales basados en IA

Un caso interesante para asimilar la cultura de la IA son los chatbots. Un chatbot conversacional es un programa informático que basado en la IA y otros desarrollos informáticos es capaz de mantener una conversación o ejecutar acciones a demanda con una persona real.

Estando en su infancia están ya llamados a revolucionar la relación de las empresas con sus clientes y sus propios empleados. Su introducción puede ser un motor de asimilación de esta nueva cultura en torno a la IA y la economía digital. Forbes  califica la Inteligencia Artificial Conversacional como la “Fase Final de la Revolución de la Información” y señala que ya es más efectiva a la hora de vender online, generar leads o incrementar la productividad en todas la facetas de la comunicación.

Los chatbots conversacionales son un paso revolucionario en la forma en la que los usuarios se comunican e interactúan en el mundo digital.

Las limitaciones de las Apps y las páginas webs vs chatbots

Hasta hace nada considerábamos y seguimos considerando una página web o una app algo extremadamente valioso que han servido para expandir el comercio online o para el desarrollo de plataformas de servicios tan extendidas como Airbnb, Uber-Cabify, o la compraventa de criptomonedas.

 En realidad, las analíticas de los smartphones nos han develado que las Apps o las páginas web (pese al diseño responsive adaptado por la mayoría de empresas) son propuestas muy “burdas” para comunicarnos con los usuarios.  De hecho las analíticas de la mayoría de los sitios web (tras desplegar las técnicas más sofisticadas de design thinking y customer experience) son despiadadas: altísimos porcentajes de rebote, bajísima capacidad de generar usuarios recurrentes, nula capacidad para identificar necesidades, tendencias, o problemas subyacentes en la tecnología empleada.  A veces estos temas llegan a situaciones un tanto dramáticas: una empresa que ha hecho en apariencia todos sus deberes no percibe que una versión importante de IOS/Android no admite una plataforma específica de pago y los usuarios no lo transmiten, dejando fuera de su mercado a un elevado porcentaje de usuarios.

Las propuestas que Google (Google Home) o Amazon (Amazon Echo) quieren colocarnos en casa evidencian que lo lógico y cómodo es que el usuario pregunte con su lenguaje natural o pida algo y la tecnología se lo facilite. El teléfono móvil desde sus inicios está pidiendo a gritos una comunicación con el usuario de este tipo. Nuria Oliver llega más lejos sobre el futuro del móvil al señalar que incluso desaparecerá.

Las empresas que no adapten sus sistemas a esta nueva cultura pueden quedar muy rezagadas e incluso descolgadas del mercado.

Los chatbots conversacionales pueden canalizar toda la información y la comunicación interna y externa de una empresa. Con un tamaño superior a 50 empleados la comunicación interna de la empresa requiere de estructuras costosas y poco eficaces para canalizar la información interna. Un chatbot en una revolución en toda regla. Su data permitiría identificar hasta el estado emocional positivo o negativo global de una empresa de 200.000 empleados y de una sucursal de menos de 50. Amén de la identificación de problemas, feedback de clientes, etc.

Por su parte, la comunicación externa a través de la tecnología chatbot es una revolución de una entidad todavía difícil de evaluar pero fácil de intuir: comercio online, call centers, captación de leads.. Un “vendedor” amable,  capaz de dar un trato personalizado, que trabaja 24 horas los 7 días de la semana y que ejecuta peticiones de los clientes, desde una reserva, un pedido, una orden de compra, o atiende una queja…

Los Chatbots conversacionales no son un coste sino una inversión que abre la puerta a una nueva cultura digital en la empresa: la era de digital basada en el data y la Inteligencia Artificial.

Fuente: Observatorio IA