Coronavirus: Las preguntas que te haces y sus respuestas en un solo lugar
Desde que comenzó la pandemia del coronavirus la información en todos los medios abruma y confunde al extremo. Miles de preguntas sin respuestas claras llevan a la confusión de no saber dónde se está parado. Intentamos en esta nota aclarar el panorama lo más posible.
¿Qué es un coronavirus?
Los coronavirus son una familia de virus que pueden causar enfermedades en animales y en humanos. En los seres humanos pueden causar infecciones respiratorias que van desde un resfrío común hasta enfermedades más graves.
¿Cómo se propaga la COVID‑19?
Una persona puede contraer la COVID‑19 por contacto con otra que esté infectada por el virus. La enfermedad se propaga principalmente de persona a persona a través de las gotitas que salen despedidas de la nariz o la boca de una persona infectada al toser, estornudar o hablar. Estas gotitas son relativamente pesadas, no llegan muy lejos y caen rápidamente al suelo. Por eso es importante mantenerse al menos a un metro de distancia de los demás.
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¿Es posible contagiarse por contacto con una persona asintomática?
Sí, ya que libera partículas virales al toser, estornudar o hablar.
¿Qué debo hacer si he estado en contacto estrecho con alguien que tiene COVID‑19?
Si ha estado en contacto estrecho con alguien con COVID‑19, puede estar infectado.
Contacto estrecho significa vivir con alguien que tiene la enfermedad o haber estado a menos de un metro de distancia de alguien que tiene la enfermedad. En estos casos, es mejor quedarse en casa.
¿Qué debo hacer si no tengo síntomas pero creo que he estado expuesto a la COVID‑19? ¿Qué significa ponerse en cuarentena?
Ponerse en cuarentena significa separarse de los demás porque ha estado expuesto a alguien con COVID‑19 aunque usted mismo no tenga síntomas. Durante la cuarentena, debe vigilar su estado para detectar síntomas. El objetivo de la cuarentena es prevenir la transmisión. Dado que las personas que enferman de COVID‑19 pueden infectar a otros inmediatamente, la cuarentena puede evitar que se produzcan algunas infecciones.
En este caso:
- Ocupe una habitación individual amplia y bien ventilada con retrete y lavabo.
- Si esto no es posible, coloque las camas al menos a un metro de distancia.
- Manténgase al menos a un metro de distancia de los demás, incluso de los miembros de su familia.
- Controle sus síntomas diariamente.
- Permanezca en cuarentena durante 14 días, incluso si se siente bien.
- Si tiene dificultades para respirar, póngase en contacto inmediatamente con su dispensador de atención de salud. Llame por teléfono primero si es posible.
- Permanezca positivo y con energía manteniendo el contacto con sus seres queridos por teléfono o internet y haciendo ejercicio en casa.
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¿Cuál es la diferencia entre aislamiento, cuarentena y distanciamiento?
La cuarentena significa restringir las actividades o separar a las personas que no están enfermas pero que pueden haber estado expuestas a la COVID‑19. El objetivo es prevenir la propagación de la enfermedad en el momento en que las personas empiezan a presentar síntomas.
El aislamiento significa separar a las personas que están enfermas con síntomas de COVID‑19 y pueden ser contagiosas para prevenir la propagación de la enfermedad.
El distanciamiento físico significa estar físicamente separado. La OMS recomienda mantener una distancia de al menos un metro con los demás. Es una medida general que todas las personas deberían adoptar incluso si se encuentran bien y no han tenido una exposición conocida a la COVID‑19.
¿Qué puedo hacer para protegerme y prevenir la propagación de la enfermedad?
Manténgase al día de la información más reciente sobre el brote de COVID‑19, a la que puede acceder en el sitio web de la OMS y a través de las autoridades de salud pública a nivel nacional y local. Se han registrado casos en la mayoría de los países del mundo, y en muchos de ellos se han producido brotes. Las autoridades de algunos países han conseguido ralentizar el avance de los brotes, pero la situación es impredecible y es necesario comprobar con regularidad las noticias más recientes.
Hay varias precauciones que se pueden adoptar para reducir la probabilidad de contraer o propagar la COVID‑19:
- Lávese las manos a fondo y con frecuencia usando un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
¿Por qué? Lavarse las manos con agua y jabón o con un desinfectante a base de alcohol mata los virus que pueda haber en sus manos.
- Mantenga una distancia mínima de un metro entre usted y los demás.
¿Por qué? Cuando alguien tose, estornuda o habla despide por la nariz o la boca unas gotículas de líquido que pueden contener el virus. Si la persona que tose, estornuda o habla tiene la enfermedad y usted está demasiado cerca de ella, puede respirar las gotículas y con ellas el virus de la COVID‑19.
- Evite ir a lugares concurridos
¿Por qué? Cuando hay aglomeraciones, hay más probabilidades de que entre en contacto estrecho con alguien que tenga COVID‑19 y es más difícil mantener una distancia física de un metro.
- Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca
¿Por qué? Las manos tocan muchas superficies y pueden recoger virus. Una vez contaminadas, las manos pueden transferir el virus a los ojos, la nariz o la boca. Desde allí, el virus puede entrar en su cuerpo y causarle la enfermedad.
- Tanto usted como las personas que lo rodean deben asegurarse de mantener una buena higiene respiratoria. Eso significa cubrirse la boca y la nariz con el codo flexionado o con un pañuelo al toser o estornudar. Deseche de inmediato el pañuelo usado y lávese las manos.
¿Por qué? Los virus se propagan a través de las gotículas. Al mantener una buena higiene respiratoria protege a las personas que lo rodean de virus como los del resfriado, la gripe y la COVID‑19.
- Permanezca en casa y aíslese incluso si presenta síntomas leves como tos, dolor de cabeza y fiebre ligera hasta que se recupere. Pida a alguien que le traiga las provisiones. Si tiene que salir de casa, póngase una mascarilla para no infectar a otras personas.
¿Por qué? Evitar el contacto con otras personas las protegerá de posibles infecciones por el virus de la COVID‑19 u otros.
- Si tiene fiebre, tos y dificultad para respirar, busque atención médica, pero en la medida de lo posible llame por teléfono con antelación y siga las indicaciones de la autoridad sanitaria local.
¿Por qué? Las autoridades nacionales y locales dispondrán de la información más actualizada sobre la situación en su zona. Llamar con antelación permitirá que su dispensador de atención de salud le dirija rápidamente hacia el centro de salud adecuado. Esto también lo protegerá a usted y ayudará a prevenir la propagación de virus y otras infecciones.
- Manténgase informado sobre las últimas novedades a partir de fuentes fiables, como la OMS o las autoridades sanitarias locales y nacionales.
¿Por qué? Las autoridades locales y nacionales son los interlocutores más indicados para dar consejos sobre lo que deben hacer las personas de su zona para protegerse.
Cómo utilizar adecuadamente una mascarilla
La mascarilla debe cubrir la boca y la nariz por completo para evitar la expulsión de las gotitas al hablar, estornudar o toser.
¿Cuánto tiempo transcurre entre la exposición a la COVID‑19 y el desarrollo de síntomas?
El tiempo que transcurre entre la exposición a la COVID‑19 y el momento en que comienzan los síntomas suele ser de alrededor de cinco o seis días, pero puede variar entre 1 y 14 días.
¿Puede un animal doméstico u otro animal contagiarme la COVID-19?
Varios perros y felinos (gatos domésticos y tigres) han dado positivo en las pruebas de detección de la COVID-19 después de haber estado en contacto con humanos infectados. Además, parece ser que los hurones son susceptibles a la infección. En condiciones experimentales, tanto los gatos como los hurones pueden transmitir la infección a otros animales de la misma especie. Sin embargo, no existen datos probatorios de que estos animales puedan transmitir la enfermedad al ser humano y propagar la COVID-19. La COVID-19 se propaga principalmente a través de las gotículas que despide una persona infectada al toser, estornudar o hablar.
Las manos tocan muchas superficies y pueden contener el virus en su superficie. Una vez contaminadas, pueden transferir el virus a los ojos, la nariz o la boca. Si el virus ingresa puede causar la enfermedad.
Por este motivo es importante lavar las manos frecuentemente o utilizar alcohol en gel.
Ver más: Las mutaciones de Brasil y Sudáfrica ponen en jaque a las vacunas
¿Qué es una mutación?
Los virus hacen copias de sí mismos en un proceso denominado replicación en el que, a veces, las nuevas copias presentan pequeños cambios. Estos cambios se denominan «mutaciones». Un virus que ha sufrido una o varias mutaciones es una «variante» del virus original.
Cuanto más circulan los virus, más susceptibles son de modificarse. Ocasionalmente esas modificaciones pueden dar lugar a una variante del virus que está mejor adaptada a su entorno en comparación con el virus original. Este proceso de modificación y selección de las variantes mejor adaptadas se denomina «evolución vírica».
¿Debemos preocuparnos por las mutaciones del SARS-CoV-2?
Es normal que los virus cambien, pero es un fenómeno que los científicos siguen estrechamente porque puede tener repercusiones importantes. Todos los virus, y también el SARS-CoV-2, el que provoca la COVID-19, cambian con el paso del tiempo. Hasta la fecha se han detectado cientos de variaciones de este virus en todo el mundo.
Algunas mutaciones pueden conllevar cambios en las características de un virus, como alteraciones en la transmisión (por ejemplo, puede propagarse más fácilmente) o la gravedad (por ejemplo, puede provocar una enfermedad más grave).
¿Por qué resultó tan efectivo y letal en humanos?
Porque el virus SARS-CoV-2 posee una de las características biológicas más importantes como llave de entrada al cuerpo humano: la molécula enzima convertidora de angiotensina 2 (o ACE 2), que está presente en gran medida en nuestro organismo como en pulmones, riñones e intestinos. Entonces el virus ingresa al organismo infectando células y duplicándose en su material genético con el objetivo de dividirse y generar más copias”, amplió el director de la licenciatura Bioinformática y la licenciatura en Biotecnología de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE).
¿Las vacunas actuales sirven para las nuevas variantes?
“La mayoría de las vacunas para SARS CoV 2 se desarrollaron mediante estrategias de ingeniería genética. Esto permitió acelerar los tiempos pero también permitiría, en el caso de ser necesario, introducir modificaciones en las secuencias genómicas de la espícula viral, que es el blanco o target que todas eligen como principal estimulo inmunitario para que el organismo produzca anticuerpos. Así, la carrera contra los “pequeños mutantes”, nunca arrancaría de 0″, explica Claudia Perandones, directora científica de ANLIS Malbrán.
“La buena noticia es que las nuevas vacunas son esencialmente como los correos electrónicos que enviamos al sistema inmunológico, y son muy fáciles de ajustar. Así que si sabemos que ha cambiado muy ligeramente, solo tenemos que editar ese correo electrónico, cambiar una o dos palabras y entonces la vacuna que estará lista en seis u ocho semanas después de eso, será competente y mejor dirigida a la nueva cepa”, aclara el profesor Calum Semple, de la Universidad de Liverpool.