¿Es el fin de la inmunidad legal de las redes sociales?

La protección especial contra acciones legales de la que gozan grandes redes sociales como Facebook, Twitter o Google podría llegar a su fin. Al menos esa es la intención del presidente norteamericano, Donald Trump, con la firma de la orden ejecutiva de este jueves.

Hace exactamente un año, el presidente acusó a las principales redes sociales de tener un “sesgo progresista” y avisó sobre un cambio legal. Durante las últimas semanas, volvió a mostrar sus intenciones de emprender un cambio legislativo que parece haberse precipitado después de que Twitter mostrase mensajes de aviso en varios de tus tuits.

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La orden ejecutiva tiene como objetivo la sección 230 de la Communications Decency Act. Una ley que da inmunidad a las paginas web que seleccionan y moderan contenidos creados por terceros, como sucede en las principales redes sociales.

Una legislación que ha permitido configurar internet como lo conocemos hoy en día y que ha blindado ante posibles acciones legales a grandes empresas como Facebook, Twitter o Google y les da libertar para configurar y moderar sus plataformas como deseen.

El presidente Trump sitúa el concepto legal de “la buena fe” como centro de la polémica y argumenta que las redes sociales no habrían actuado “de buena fe” y que se habrian aprovechado de la legislación.

“En un país que celebra la libertad de expresión no podemos permitir a un numero limitado de plataformas online elegir a dedo los discursos que los americanos pueden transmitir y a los que pueden acceder en Internet”, asegura.

De este modo, con la orden ejecutiva, el Departamento de Comercia pedirá a la Comisión Federal de Comunicaciones (FFC) una nueva regulación para aclarar cuando una empresa podría estar vulnerando el principio de buena fe recogido en la sección de 230.

La nueva normativa establece que la vulneración del principio de buena fe tendría como consecuencia que las agencias federales no podrían anunciarse en estas redes sociales, además de posibles procesos judiciales en su contra.

Además, la orden insta al Departamento de Justicia a ponerse en contacto con los distintos fiscales de los Estados para investigar las acusaciones de sesgo anti-consevador.

Por último, la orden ejecutiva interpela a la FCC a emitir informes sobre las quejas de contra el sesgo político de las redes sociales que ha recogido La Casa Blanca y considera la posibilidad de emprender acciones legales contra las redes sociales que hayan podido vulnerar el principio de buena fe de la mencionada sección 230 que se ve alterada con este nuevo mandato presidencial.