¿Es el open banking el futuro de la banca?

La pandemia por Covid-19 aceleró procesos de digitalización en todo el mundo que llevaban años gestándose. En medio de una cuarta revolución industrial que no se detiene, los efectos y consecuencias de estos desarrollos impactan de manera diferenciada a nivel internacional, a medida que los ciclos de reactivación económica comienzan a agilizarse.

A mejor integración digital, mayor ha sido la capacidad de respuesta frente a cambios intempestivos como los que supone una emergencia sanitaria mundial. Y al centro de esta vorágine es que se encuentran ideas clave para el futuro de la finanzas como lo es el open banking, o banca abierta.

La banca abierta es un modelo que propone la apertura e intercambio de información, tanto individual como agregada, entre entidades financieras. Por un lado, esta diseminación de datos supone una mayor competencia entre intermediarios; por el otro, busca que, en la medida que se amplíe la documentación de cifras y patrones, se podrán desarrollar más y mejores productos y servicios, así como ofertas personalizadas, que correspondan a las necesidades de cada usuario.

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La transición a este modelo requiere de la intersección de tecnología y asesoría financiera que es desarrollada constantemente por empresas fintech. De acuerdo con Finerio Connect, empresa mexicana de open banking, México comienza a convertirse en líder en servicios financieros de este tipo en Latinoamérica. Su posición en la punta de la lanza no es fortuita. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadìstica y Geografìa (INEGI), sólo 47% de la población tiene acceso a una cuenta de banco; en ese contexto, los productos de banca abierta permiten democratizar el acceso a este tipo de instrumentos.

Más allá de la inclusión financiera

La apertura de información que brinda el open banking abre la puerta a un futuro financiero más práctico y seguro basado en datos y herramientas tecnológicas para hacer mucho más sencillas algunas acciones, que van más allá de abrir una cuenta de banco. Algunos de estos beneficios se detallan en el informe de Finerio, Open banking en México: Diagnóstico y tendencias:

  • Mejor conocimiento de usuarios y clientes potenciales,
  • Automatización de procesos de Know Your Customer (KYC)
  • Creación de nuevos productos y servicios,
  • Reducción de costos al utilizar infraestructura de terceros,
  • Expansión y fidelización de la base de clientes,
  • Nuevos modelos de negocio,
  • Reducción de fraudes.

“El desarrollo de soluciones tecnológicas ayuda a empoderar diferentes personas y negocios, no solamente instituciones bancarias. De igual manera, las empresas obtienen beneficios, pues el libre tránsito de datos derriba barreras que impedían el ejercicio de dinámicas más saludables, sencillas y asequibles”, afirma Nick Grassi, Co-CEO de Finerio Connect.

En suma, la banca abierta promete un futuro financiero que caminará hacia la personalización de los servicios adquiridos por los usuarios. De tal modo, cada vez son más las empresas que, sin importar su giro o antigüedad, suman herramientas de open banking a sus estrategias comerciales. Ésta es la transformación hacia la experiencia del usuario-empresa con modelos novedosos, accesibles y funcionales.