Huawei acusa a Estados Unidos de ciberataques, acoso político, judicial y detenciones ilegales
En otro nivel, pero la guerra comercial que sostienen China y los Estados Unidos continúa, y en esta nueva fase Huawei sigue siendo un actor principal del conflicto. Ahora la gigante asiática de telecomunicaciones acusa al gobierno de Estados Unidos de emprender una campaña de denostación y desprestigio, “con cada herramienta a su disposición”, que incluye, ciberataques, espionaje y acoso, entre otras prácticas.
Mediante un comunicado que desplegó en su página de Internet y más tarde replicó en sus redes sociales, Huawei se centra en una nota publicada en The Wall Street Journal el pasado 30 de agosto, en la que se informa que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos probó que la compañía es culpable de presunto robo de patentes de cámaras. Huawei niega las acusaciones y asegura que son falsas.
A partir de un encuentro que en mayo de 2014 sostuvieron representantes de la compañía en Estados Unidos con un hombre llamado Rui Pedro Oliveira a petición de éste, les fue mostrado el diseño de una cámara que de acuerdo a Oliveira estaba en proceso de patente. De acuerdo a Huawei, no les interesó el producto y no hubo más contacto entre ambas partes.
Sin embargo, a partir de la primavera de 2018 y a lo largo de casi un año, Oliveira envío una serie de correos electrónicos a la compañía en los que aseguraba que la cámara EnVizion 360 era propiedad suya y Huawei había violado sus patentes en Estados Unidos. Dicho dispositivo es un accesorio que graba video y toma fotografías de 360 grados, que Huawei asegura desarrolló de manera independiente y colocó en el mercado por la misma época.
Según lo expuesto por Huawei, Oiveira, amenazó a la compañía con iniciar una campaña mediática, así como hacer uso de canales políticos oficiales y de gran influencia, si no recibía una compensación millonaria por la violación a sus patentes. La narrativa de Oliveira, un inventor de origen portugués, la cual Huawei clama es falsa y se sustenta en el actual conflicto que sostienen las dos potencias económicas más grandes del mundo, al parecer escaló al punto de llegar al Departamento de Justicia y de tener relevancia en un medio como The Wall Street Journal.
En tales circunstancias se sustenta la réplica hecha pública por Huawei, que asegura que durante los últimos meses el gobierno de Estados Unidos ha utilizado sus influencias políticas y diplomáticas para influir en otros gobiernos con la intención de que los equipos de Huawei sean prohibidos y vetados.
“Asimismo, ha utilizado cualquier herramienta a su disposición (lo cual incluye poderes tanto judiciales como administrativos, así como una gran cantidad de actos inescrupulosos), para afectar el desarrollo habitual de los negocios de Huawei y sus socios”, se lee en el comunicado.
Huawei enlista una serie de tópicos que incluyen amenazas, coerción e incitación para que los empleados y ex empleados de Huawei se vuelvan en contra de la compañía; ataques cibernéticos para infiltrar la Intranet de la empresa; presencia de agentes del FBI en los hogares de los empleados con la intención de presionar y obtener información sensible, así como detenciones ileagles de empleados y socios de la empresa, entre algunas más.
El comunicado de Huawei no ha generado todavía reacciones en las instancias gubernamentales de Estados Unidos, pero a no dudarlo recibirá acuse de recibo y respuesta llegado el momento. Por lo pronto, en otro nivel y aún con Huawei como protagonista, la disputa tecnológica y comercial continúa.