La inflación de Estados Unidos, las tasas de interés y el Bitcoin

Por Daniel Fortuna – Economista

Para paliar los efectos de la pandemia, los países más ricos, y en especial Estados Unidos, introdujeron una política económica expansiva, es decir, una fenomenal inyección de dinero y una bajísima tasa de interés y, hasta hace pocos días, la política de del presidente de la Reserva Federal (Fed) Jerome Powell, era básicamente continuar con los estímulos monetarios, ya que el pensamiento era que la inflación que produjo las medidas que mencionamos era transitoria y que paulatinamente iba a ir bajando a lo largo de 2022, por eso se preveía disminuir la inyección de dinero para fines del primer semestre y comenzar a subir las tasas recién en el segundo semestre.

Pero la inflación de octubre, 6.2%, fue la más alta de los últimos 30 años y el avance de la variante omicrón hicieron pensar que la inflación no es transitoria y un cambio de rumbo sería necesario.

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Por eso, la disminución de la inyección de dinero se adelantaría para el final del primer trimestre en vez del final del segundo, y la suba de tasas de interés sería para el primer semestre y no para el segundo. Entonces la prioridad será la lucha contra la inflación en lugar del estímulo a la actividad económica.

El aumento de las tasas de interés atenta contra el precio de las criptomonedas, con el Bitcoin a la cabeza, por ser la más emblemática del mercado, ya que estas actúan como inversiones de riesgo y les costaría competir con tasas altas en activos de menor riesgo y variabilidad.

Por lo tanto, si el avance de omicrón produce una nueva intervención de los bancos centrales, podría ser, nuevamente, un gran estímulo para las cripto.