Samsung, Nokia y el dilema de cuál es el tamaño de pantalla ideal

 (Internacional) Para ser líder no solo hay que ser el número 1 en ventas, también es importante marcar tendencia. Samsung, el líder actual, busca posicionar las pantallas de 5 pulgadas, mientras que Nokia, que busca retomar su liderazgo mundial de la mano de Microsoft, cree que las pantallas deben ser más pequeñas.

Veamos los dos casos: El Samsung Galaxy SIII es el último modelo del fabricante coreano, con el que pretende cautivar a los usuarios high-end y a los early adopters. Este teléfono móvil con sistema operativo Android 4.0 (Ice Cream Sandwich), viene con dos cámaras, una en el frontal de 1,9 megapíxeles, válida para las videollamadas. Sin embargo, es la cámara principal, situada en la trasera la que alcanza una resolución 8 Mpx. Cuenta con un zoom digital de cuatro aumentos y con autoenfoque. Además, integra un flash LED y ofrece varios modos de disparo, similares a los muchas cámaras compactas, como el disparo por sonrisa, el disparo continuo o el disparo por voz. También facilita la toma de autorretratos y fotos panorámicas. Incluso existe la posibilidad de conseguir imágenes de alto rango dinámico (modo HDR), donde tanto las zonas oscuras como las claras salen muy detalladas. Incluso permite seleccionar tres efectos fotográficos, como el de foto antigua (sepia), el negativo o el blanco y negro.

Este equipo incorpora muchísimas otras características, aunque en este caso vamos a reparar en su pantalla Super AMOLED con una diagonal de 4,8 pulgadas (12,2 centímetros), que ofrece una resolución de 1.280 por 720 píxeles.

¿Por qué detenerse en este detalle? Porque el Lumia 900, la última innovación de Nokia,  tiene una pantalla de 4,3 pulgadas, y es aquí donde la finlandesa presenta uno de sus diferenciales respecto a la coreana. “Una pantalla de caso 5 pulgadas es demasiado grande para un teléfono. No entra en el bolsillo del jean, resulta incómodo de transportar y hasta de manipular, ya que requiere el uso de las dos manos”, justifican desde Nokia.

De cara al futuro, está claro que la pantalla de los smartphones será una de las variables más fuertes, sobre todos si se tienen en cuenta que los teclados físicos irán desapareciendo. Desde Samsung privilegian las pantallas grandes, pensando que a través de ella el usuario accederá a todos sus contenidos prácticamente desde el mismo equipo. Por el contrario, en Nokia creen que los usuarios serán propietarios de una gama de dispositivos como tabletas, notebooks y teléfonos inteligentes y accederán a sus contenidos desde el hardware que más le convenga en cada momento.

Evidentemente, no estamos frente a una “pequeña diferencia de pulgadas”, sino que nos encontramos ante la visión que cada una de estas corporaciones tiene respecto a cómo se relacionan los usuarios con sus smartphones.