Tecnológicas de Estados Unidos continúan con la venta de productos a Huawei pese al veto de Donald Trump
Un grupo de compañías especializadas en la fabricación de chips, habría continuado con la venta de millones de dólares en mercancía a Huawei, pese al veto comercial impulsado por Donald Trump para impedir la venta de tecnología estadounidense al gigante chino de las telecomunicaciones, informó The New York Times citando a cuatro personas de las que no reveló su identidad.
De acuerdo a los informantes a los que alude el diario neoyorquino, dichas compañías estadounidenses, entre las que se cuentan Intel y Micron, hallaron algunos subterfugios legales para continuar con la venta de componentes para Huawei, desde el momento mismo en que el Departamento de Comercio de los Estados Unidos aprobó el veto el pasado mes de mayo.
NYT señala que en virtud a que los bienes que fabrican las compañías estadounidenses en el extranjero no siempre son considerados “hechos en el país”, los proveedores de los mismos pueden tomar ventaja de lo anterior. Los productos, que comenzaron a llegar a Huawei hará cosa de tres semanas, mantendrían vigente la producción de smartphones y servidores por parte de la transnacional asiática.
Como se recordará, aludiendo razones de seguridad nacional, Donald Trump acusó a Huawei de realizar labores de espionaje para el gobierno de Beijing y le incluyó en la llamada Entity List, impidiendo con ello que las compañías estadounidenses mantuviesen relaciones comerciales con la empresa china, con el objetivo asestarle un duro golpe y dificultar sus operaciones.
Dado que el modelo de negocio de Huawei requiere de la importación constante de componentes y productos de origen estadounidense, el veto de la administración Trump ciertamente le colocó en una situación difícil. Sin embargo, la fortaleza de Huawei en tanto empresa transnacional esta fuera de discusión, y si bien pudo haber resentido el veto comercial de Washington, queda claro que llegado el momento el gobierno de Beijing saldría al paso para apoyar a la firma de telecomunicaciones.
Pero dinero es dinero, y el veto también significa pérdidas para los proveedores estadounidenses, que como se informa en el reportaje de NYT han hallado un camino alterno para evadir las disposiciones de Washington y continuar con la venta de sus productos a Huawei.
En este sentido, el matutino estadounidense pone énfasis en lo difícil que resulta para la administración Trump tomar medidas drásticas en contra de empresas a las que considera una amenaza para la seguridad nacional. Del mismo modo, también sugiere la posibilidad de consecuencias no deseadas al alterar el equilibrio de la red de relaciones comerciales que vinculan a la industria mundial de los electrónicos y el comercio global.
El NYT detalla que si bien en teoría las empresas estadounidenses pueden continuar vendiendo sus bienes a Huawei hasta mediados de agosto próximo, el veto comercial también aplica para productos futuros de la compañía asiática. En ese sentido, no existe claridad en relación a qué porcentaje de las ventas actuales aplican para productos futuros.
Las fuentes anónimas citadas por el diario, como es previsible, hablan de ventas por cientos de millones de dólares. Debe ser así. Huawei ha dicho en repetidas ocasiones que paga anualmente alrededor de 11,000 millones de dólares a empresas estadounidenses especializadas en tecnología.
Consultadas por NYT, tanto Micron como Intel se negaron a hacer comentarios sobre el asunto.